Aumento de 15.38% en precios de carne
El reciente incremento del 15.38% en el precio de la carne de cerdo en las carnicerías de la zona maya ha generado preocupación entre los hogares locales, quienes ven en este ajuste una carga económica adicional.
El kilogramo de carne de cerdo pasó de costar 110 pesos a 130 pesos debido a los ajustes en los precios de los proveedores.

Durante un recorrido por el mercado municipal Benito Juárez García, los carniceros explicaron la difícil situación en la que se encuentran. A pesar de su deseo de mantener los precios bajos para sus clientes, el aumento en los costos del producto les ha obligado a ajustar sus tarifas. Juan Canul, trabajador de la carnicería ‘El Padrino’ en dicho mercado, afirmó que desde la semana pasada se comenzaron a aplicar los nuevos costos y que, pese a la queja de los clientes, no han podido hacer nada al respecto.
Precios de otros productos de cerdo también aumentan
Canul detalló que otras variantes de productos del cerdo, como costillas, chuletas y nudillos, también han experimentado incrementos. Estos productos ahora cuestan 120 pesos por kilogramo, en comparación con los 100 pesos anteriores. Aunque las grandes cadenas comerciales también han ajustado sus precios, las carnicerías locales ofrecen la ventaja de la frescura y calidad de sus productos, que no son congelados.
“Entendemos que este incremento afecta a nuestros clientes, pero estamos siendo presionados por los costos que nos imponen los proveedores. No tenemos otra opción si queremos seguir operando”, explicó Canul. Agregó que, además de los costos del producto, deben enfrentar gastos adicionales como el flete, la matanza de los animales y su limpieza.
Impacto en las familias de la región
Los consumidores han manifestado su descontento y preocupación ante el aumento de precios, ya que la carne de cerdo es un alimento básico en muchas dietas familiares. Este ajuste, aunque justificado por las condiciones del mercado, representa una carga adicional para los hogares de la zona.
En un contexto económico ya desafiante, esta medida preocupa tanto a comerciantes como a consumidores. Los carniceros, a pesar de las críticas, buscan mantener la viabilidad de sus negocios y seguir ofreciendo productos de calidad. Por otro lado, las familias de la región deberán ajustar sus presupuestos para enfrentar este nuevo aumento en los costos de la carne de cerdo.
Fuente: 24 hrs Quintana Roo