La organización “Mujeres por la Sostenibilidad Ambiental y Alimentaria” ha denunciado que las playas y comunidades cercanas a los recientes derrames de petróleo en el Golfo de México se están convirtiendo en “zonas de sacrificio” debido a la falta de acción en la remediación de los daños ambientales. Los derrames, que ocurrieron en junio y julio, han generado problemas de salud para los habitantes locales y daños significativos en la vida marina.
La representante de la asociación, Diana Morales, indicó que las autoridades, especialmente la compañía petrolera estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), han ignorado las consecuencias de los derrames y el incendio en una plataforma petrolera que resultó en muertes y heridas. Según Morales, las comunidades afectadas están sufriendo los impactos de la negligencia de Pemex.
Los habitantes de estas áreas han reportado problemas de salud como dolores de cabeza, problemas de piel y olores a gas después de los derrames. Los niños también han sido afectados, llegando al hospital con vómitos y diarreas debido a la contaminación del agua por hidrocarburos. Los mantos acuíferos también están siendo contaminados, afectando la vida cotidiana de las comunidades.
En términos de biodiversidad marina, las poblaciones de tortugas en peligro de extinción, como la laúd, la caguama y la carey, también están siendo impactadas. Los campamentos de anidación de tortugas en las playas de Campeche están siendo afectados por la irritación de la piel, la adherencia de contaminantes y la ingestión de químicos, lo que podría tener un impacto a largo plazo en su salud.
Además, las colonias de peces, moluscos y otras especies marinas están siendo dañadas por el petróleo, lo que afecta a la economía de los pescadores locales.
Las activistas han subrayado que no se ha implementado un programa efectivo de remediación y limpieza por parte del Gobierno Federal o de Pemex. Además, los recursos destinados a los productores afectados son manejados discrecionalmente por las autoridades municipales.
Esta denuncia pone de relieve la necesidad de una acción inmediata para abordar los derrames de petróleo y sus efectos en el medio ambiente y las comunidades locales, así como la importancia de la regulación y la supervisión adecuadas de las actividades petroleras para prevenir futuros desastres ambientales.
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