El director del FBI, James Comey, confirmó por primera vez una investigación sobre la interferencia rusa durante la carrera presidencial de 2016, especialmente una posible coordinación entre miembros de la campaña de Donald Trump y el Kremlin.
Al comparecer ante la Comisión de Asuntos de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Comey dijo que el FBI “está investigando los esfuerzos del gobierno ruso para interferir en la elección presidencial de 2016“.
“Eso incluye investigar la naturaleza de los lazos entre individuos asociados con la campaña de Trump y el gobierno ruso y si hubo alguna coordinación entre la campaña y los esfuerzos de Rusia”, anotó.
Comey indicó que aunque el FBI no habla sobre investigaciones en curso, se le autorizó hacer una excepción debido a la alta importancia que el tema tiene para interés público.
“Esta es una labor sumamente compleja, por lo que no les puedo dar una fecha exacta de cuándo concluirá”, dijo Comey.
Desmienten a Trump
El Director de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), James Comey y el Director de la Agencia Nacional de Inteligencia (NSA), Mike Rogers, negaron que el expresidente Barack Obama haya ordenado espiar a Donald Trump durante la campaña presidencial.
“El FBI y el Departamento de Justicia no tienen información para apoyar esos tuits”, dijo Comey ante legisladores al ser cuestionado sobre la acusación hecha por Trump tres semanas atrás, y quien hasta ahora no ha ofrecido evidencia alguna para respaldar su dicho.
Rogers negó también que su agencia haya solicitado a su contraparte británica, GCHQ, conducir espionaje electrónico contra Trump como lo repitió la semana pasada la Casa Blanca, al indicar que eso habría constituido una violación de la ley que impide a agencias estadunidenses espiar a sus ciudadanos.
Aunque los comités de inteligencia del Senado y la Cámara de Representantes han señalado que no existe evidencia que soporte la acusación de Trump, el peso de la negativa de Comey y Rogers es notable por ser estas las agencias a cargo de investigar temas de espionaje doméstico y conducir espionaje electrónico, de manera respectiva.
Tres semanas atrás, utilizado su herramienta favorita de comunicación, Twitter, Trump acusó a Obama de haber ordenado espiar sus conversaciones telefónicas en la Torre Trump en Nueva York, justo antes de las elecciones de noviembre pasado.
“¡Terrible! Acabo de enterarme que Obama tenía mis ‘cables interceptados’ en la Torre Trump justo antes de la victoria. Nada Encontrado. ¡Éste es MaCartismo!”, escribió Trump en Twitter en el primero de seis mensajes. (Fuente: Aristegui Noticias)