La severa ausencia de lluvias y el incierto progreso de las cabañuelas han desatado la preocupación entre los ganaderos de la zona maya de Felipe Carrillo Puerto, ya que temen que este año pueda convertirse en un período desafiante. La falta de lluvias es una señal clara de que el crecimiento del alimento para las cabezas de reses podría verse afectado, lo que ha dejado a los ganaderos preparando medidas preventivas para enfrentar un año complicado.
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Inquietud en los ganaderos
José Acosta, líder ganadero en el centro de Quintana Roo, expresó su inquietud, indicando que a pesar de que lograron iniciar el año con mil reses sin ninguna baja, se encuentran tomando todas las previsiones necesarias para evitar futuros problemas que puedan perjudicar el desarrollo del ganado. Alertó que la ausencia de lluvias, sumada al lento avance de las cabañuelas, es un signo claro de posibles sequías, lo que podría causar estragos en la ganadería y afectar a los 120 socios que integran el sector. La pérdida o baja inversión sería un duro golpe para el sustento económico de todos los involucrados.
Escasez de lluvias
El líder ganadero señaló que la falta de pastizales debido a la falta de lluvias y la calidad insuficiente de los pastos existentes, llevaría al ganado a perder peso y calidad en la carne durante la temporada. Ante esta situación, se verían obligados a suministrarles productos balanceados para evitar pérdidas y asegurar que el ganado se mantenga con vida.
En cuanto a las proyecciones meteorológicas para los próximos meses, José Acosta mencionó que hasta marzo es común registrar escasas precipitaciones pluviales y bajas temperaturas. Sin embargo, el verdadero desafío comenzará a partir del segundo trimestre, con el inicio de la primavera, ya que se esperan temperaturas más elevadas y una mayor escasez de lluvias. Como medida preventiva, los ganaderos están adoptando las disposiciones necesarias para enfrentar esta temporada.
Crianza de búfalos
Ante esta situación, Acosta también expresó que, en respuesta a un reciente proyecto que se promueve en los ranchos del sur sobre la crianza de búfalos, podría plantearse como una alternativa viable para la zona maya. Sin embargo, hizo hincapié en la importancia de realizar un análisis exhaustivo sobre la aceptación del consumo de carne de búfalo en el mercado, con el fin de estimar el impacto y los beneficios económicos que se podrían obtener con su explotación. Señaló que, si cuentan con los recursos y el espacio suficiente, la producción de búfalos podría ser una opción adicional para contrarrestar los desafíos que enfrenta la ganadería actualmente.
La preocupación de los ganaderos en la zona maya de Felipe Carrillo Puerto es evidente, ya que la incertidumbre sobre las condiciones climáticas y la disponibilidad de alimentos para el ganado repercutirá directamente en su sustento económico. Es crucial que se implementen estrategias efectivas para enfrentar los desafíos venideros y garantizar no solo la supervivencia del ganado, sino también la estabilidad de la industria ganadera en su conjunto.
Fuentes: Novedades Quintana Roo
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