Paro escolar empuja cambio a escuelas privadas
El paro magisterial que se mantiene en escuelas públicas de Quintana Roo ha provocado que numerosas familias busquen alternativas educativas en instituciones privadas. En el municipio de Benito Juárez, padres de familia han comenzado a consultar opciones y reservar espacios en escuelas particulares para asegurar la continuidad del aprendizaje de sus hijos.
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La suspensión prolongada de clases afecta principalmente a estudiantes de nivel básico, quienes llevan semanas sin asistir a las aulas debido al movimiento encabezado por docentes en demanda de mejoras laborales. Ante la falta de solución inmediata, algunos padres ya han decidido iniciar el proceso de cambio hacia el sector privado.
Padres buscan opciones privadas
De acuerdo con Martha Aceves, representante del consejo escolar de una escuela privada en Cancún, el número de consultas ha aumentado considerablemente en las últimas semanas. Aunque la mayoría de los interesados aún no ha formalizado la inscripción, algunos ya han apartado lugar para el próximo ciclo escolar.
“Papitos vinieron a preguntar cómo pueden hacer el cambio porque sus hijos no están yendo a clases. Algunos ya han apartado lugares para el próximo ciclo escolar, aunque no podamos formalizar el alta si no nos traen la documentación”, explicó Aceves.
Este interés surge en un contexto donde muchas familias temen que la situación en las escuelas públicas se prolongue sin solución clara, lo que impacta directamente en el rendimiento académico de los alumnos.
Escuelas ofrecen facilidades económicas
En respuesta a la creciente demanda, diversas instituciones privadas han comenzado a ofrecer descuentos en las inscripciones. El objetivo es facilitar el acceso a más familias que, aunque preocupadas por la educación de sus hijos, enfrentan también dificultades económicas.
Además, docentes independientes y centros de regularización han aprovechado la coyuntura para promover servicios educativos complementarios, tanto presenciales como en línea. Esta alternativa representa una forma de apoyo para los estudiantes y también una fuente de ingresos para los profesionales de la educación afectados por el paro.
La Asociación Nacional de Escuelas Particulares (ANEP) confirmó que, aunque aún no se refleja un aumento significativo en la matrícula formal, sí se ha detectado un incremento en el número de consultas y solicitudes de información.
“No creemos que haya un incremento notable en la inscripción, pero algunas escuelas están evaluando ofrecer descuentos para facilitar el acceso”, indicó una vocera de la ANEP, quien también destacó la importancia de contar con documentación oficial para concretar los cambios.
Trámites detenidos por toma de SEQ
Uno de los principales obstáculos para que las familias concreten el cambio de plantel es la falta de atención en las oficinas de la Secretaría de Educación de Quintana Roo (SEQ), las cuales continúan tomadas por docentes en paro. Esta situación ha generado incertidumbre, ya que varios padres no pueden iniciar ni completar los trámites oficiales necesarios para cambiar a sus hijos de escuela.
El acceso a documentos como constancias, boletas o certificados de estudios está limitado, lo cual impide que las escuelas privadas puedan realizar el proceso de alta de nuevos alumnos. Mientras tanto, los estudiantes permanecen sin clases o recibiendo apoyo de manera informal en casa.
Los padres, por su parte, han expresado su frustración ante la falta de soluciones inmediatas y la poca información disponible sobre cuándo podrían reanudarse las actividades escolares normales. Aseguran que su principal preocupación es que sus hijos no pierdan el ciclo escolar por completo.
Preocupación por el futuro académico
Para muchas familias, el paro representa no solo una interrupción en la rutina escolar, sino una amenaza al rendimiento y desarrollo académico de los niños y jóvenes. Algunos padres han recurrido a redes sociales para buscar recomendaciones sobre escuelas particulares, mientras que otros ya han comenzado a buscar alternativas fuera del estado.
Mientras no se resuelva el conflicto entre los docentes y las autoridades educativas, la incertidumbre se mantiene tanto para estudiantes como para padres y maestros. La comunidad educativa espera una pronta solución que permita garantizar el derecho a la educación sin necesidad de recurrir a cambios drásticos.
Por ahora, la educación privada surge como una opción de emergencia para quienes pueden costearla, mientras que otros buscan apoyos temporales hasta que se restablezcan las clases en el sector público.
Fuente: 24 hrs Quintana Roo
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