A pesar de que el Tribunal Supremo de Estados Unidos revocó la sentencia “Roe contra Wade” en junio de 2022, que protegía el aborto a nivel federal, los datos muestran que el número de abortos en el país no disminuyó durante el año posterior a esta decisión. Según un informe de la organización Sociedad de Planificación Familiar, los abortos en Estados Unidos aumentaron un 0.2% en ese período.
El fallo “Roe contra Wade” había protegido el derecho de la mujer a elegir desde 1973, y su revocación permitió a los estados establecer su propia legislación sobre el aborto. A raíz de esta decisión, catorce estados han prohibido casi por completo el aborto, y siete han impuesto límites estrictos. Sin embargo, el informe “WeCount” revela que el número de abortos en todo el país no se redujo.
En los 12 meses posteriores a la sentencia del Tribunal Supremo, el promedio de abortos mensuales fue de 82,298, en comparación con 82,115 en los dos meses previos a la misma. El análisis del informe muestra una clara diferencia en las cifras entre los estados que han restringido el aborto y aquellos que aún lo permiten. En los estados con prohibiciones totales, se registró una disminución del 98%, y en aquellos con prohibiciones más allá de la sexta semana de embarazo, hubo una disminución del 40%.
Es importante destacar que aproximadamente un tercio de la disminución total se atribuye a Texas, uno de los estados más restrictivos que buscó limitar el aborto incluso antes de la sentencia del Tribunal Supremo. En los 33 estados restantes donde el aborto sigue siendo legal, junto con el Distrito de Columbia, se registraron casi 117,000 abortos adicionales, con un aumento interanual del 14%.
Este aumento en el número de abortos en los estados que aún permiten el procedimiento puede deberse en parte al hecho de que muchas mujeres se han visto obligadas a viajar a otros estados para obtener un aborto, ya que los recursos y servicios de salud reproductiva son limitados en los estados más restrictivos.
El informe “WeCount” se basa en datos proporcionados por proveedores de atención médica y rastrea los abortos realizados mediante procedimientos médicos o medicamentos. A pesar de los cambios significativos en la legislación estatal sobre el aborto, estos datos indican que la revocación de “Roe contra Wade” no ha resultado en una disminución sustancial en el número total de abortos en Estados Unidos, sino en un cambio en la forma en que se obtienen y se realizan estos procedimientos.
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