Julio César Acosta Grajeda, activista y creador de la página de Facebook “Resistencia Civil Apatzingán“, fue víctima de un ataque a disparos después de encabezar una protesta contra el Gobierno Municipal de Apatzingán, en el estado de Michoacán.
El incidente ocurrió en las inmediaciones del Boulevard José María Morelos y Pavón, donde Acosta Grajeda denunciaba la situación en el municipio. Previamente, el activista había informado que el 27 de junio sufrió un intento de secuestro, lo que lo llevó a solicitar protección para él y su familia por parte del estado de Michoacán.
En una transmisión en vivo, Acosta Grajeda mostró sangre en la boca, cuello y pecho, y relató que había recibido un disparo en la quijada y que también sentía dolor en el pie. Responsabilizó del atentado al subdirector de la Policía, Jesús Rangel, y al presidente municipal José Luis Cruz Lucatero.
El activista pidió ayuda y protección para su familia, mostrando su preocupación por su seguridad. Posteriormente, fue auxiliado por personas en la calle y trasladado a un hospital, donde se encuentra en estado delicado.
En respuesta a los señalamientos en su contra, el alcalde José Luis Cruz negó las acusaciones y calificó las declaraciones de Acosta Grajeda como mentiras. Afirmó que al momento del ataque, él se encontraba junto al gobernador Ramírez Bedolla entregando una obra vial. El alcalde destacó que tanto él como su familia son personas dedicadas al trabajo lícito.
El incidente ha generado conmoción en las redes sociales, y se espera que las autoridades realicen una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos y llevar a los responsables ante la justicia. La seguridad y protección de los activistas y defensores de derechos humanos es fundamental para garantizar el ejercicio de la libertad de expresión y la participación ciudadana en el país.
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