Cancún.- Al instalar el Consejo Consultivo del Consumo en el estado, el titular nacional de Profeco, Ricardo Sheffield Padilla reconoció que por el número de quejas que recibe la dependencia a su cargo, lo que “le duele” a Quintana Roo es la afectación que causa Aguakan. Anunció que a partir de este día revisará desde el origen de la concesión que le autorizó el gobierno del estado en 1994 así como los cobros indebidos generados por la “venta de aire” en lugar del vital líquido que factura la empresa a los clientes.
Ante los 21 integrantes del Consejo, Sheffield Padilla explicó que la concesionaria de agua potable ocupa el segundo lugar en número de quejas, el primer sitio pertenece a la Comisión Federal de Electricidad (CFE). En lo que va de este año acumula 700 quejas y el año anterior fueron dos mil 500 debido a cobros indebidos, principalmente porque facturan “aire”.
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“A partir de hoy iniciamos (el análisis contra Aguakan) vamos a evaluar desde los contratos del servicio hasta la naturaleza misma del operador… El rey de las quejas es Aguakan”, aseguró.
En este sentido, durante los 90 minutos que duró la instalación de dicho consejo, la expresidente del Comité de Participación Ciudadana del Sistema Estatal Anticorrupción, Miriam Cortés Franco, agregó que durante su paso por este organismo detectó que la concesión de este servicio tiene serios problemas de corrupción.
El presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún y Puerto Morelos, Roberto Cintrón Gómez también aprovechó la ocasión y le entregó copias de recibos de Aguakan en la que la empresa les factura a los hoteles por el tratamiento del agua que descargan al drenaje, pese a que las plantas que existen desde hace 30 años en la zona hotelera son operadas por Fonatur, es decir, la concesionaria cobra por un servicio que no presta, sino que lo hace el gobierno federal.
Y añadió que se estableció que si al concluir una obra de un hotel, local o departamentos, condicionan su operación a que cuente con el contrato del servicio de Aguakan.
Rafael del Río, también empresario, dijo que le agregaba una perlita más al rosario, porque explicó que las cisternas de los centros de hospedaje son monitoreadas por el personal de mantenimiento para que no se queden sin agua.
Precisó que deberían estar al cien por ciento pero la empresa no las mantiene llenas, sino que cuando están a un 35 o 40% de su capacidad, les envía el agua mediante pipas, que además les cobra, que se encuentran en mal estado y al circular en la zona hotelera, generan una mala imagen al visitante.
La presidenta del Consejo Coordinador Empresarial del Caribe, Inna Germán, añadió que actualmente no es posible cancelar el contrato con la concesionaria y aunque hay negocios interesados en hacerlo, al garantizar que habrá un tratamiento de las aguas negras, no es posible cancelar a lo que el Procurador respondió que si el cliente garantiza que es posible cerrar el círculo del tratamiento de las aguas negras hay posibilidad legal de cancelar. Fuente: Grupo Pirámide