Este domingo, una multitud se congregó en el Zócalo capitalino en el marco de la “Marcha por la Democracia”.
La denominada marea rosa tomó las calles para demandar elecciones transparentes y respeto a las instituciones democráticas. Su solicitud específica fue instar al gobierno a no intervenir en las elecciones del próximo 2 de junio.
Según información de El País, la manifestación estuvo impregnada de consignas ciudadanas y se convirtió en un fuerte clamor expresado por miles de voces contrarias a Andrés Manuel López Obrador.
Lorenzo Córdova Vianello, exconsejero presidente del INE, resaltó en su discurso los riesgos que enfrenta la democracia mexicana ante los intentos de desmantelar al Instituto Nacional Electoral para convertirlo en un órgano que responda al gobierno en turno.
Alertó sobre las recientes reformas propuestas que amenazan la independencia de las instituciones garantes de la democracia y advirtió sobre el acoso constante hacia organismos como el INE y la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Córdova Vianello destacó la “deslealtad” de aquellos que violan normas democráticas cuando están en el poder y denunció los riesgos de modificar la Constitución para limitar libertades y derechos ciudadanos, así como para polarizar la sociedad.
Aunque los organizadores cifran la participación en 700,000 personas, fuentes gubernamentales sugieren una convocatoria más modesta de alrededor de 90,000 asistentes. Sin embargo, los participantes afirmaron que las imágenes difundidas en redes sociales no podían ocultar el abrumador respaldo a la convocatoria.