Donald Trump asumió este lunes 20 de enero su segundo mandato como presidente de Estados Unidos, sucediendo a Joe Biden. Con un discurso cargado de propuestas, el republicano detalló las políticas que impulsará desde la Casa Blanca, en un evento marcado por la historia y la tradición. La investidura tuvo lugar en el Capitolio, un lugar emblemático que acogió a líderes internacionales y figuras destacadas del mundo empresarial.
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Trump asume como 47º presidente de EE. UU.
Con 78 años, Donald Trump juró su cargo como el 47º presidente de Estados Unidos, prometiendo proteger la Constitución bajo la emblemática cúpula del Capitolio. La ceremonia, que comenzó al mediodía hora de Washington (17:00 GMT), fue histórica por celebrarse en el interior del edificio, algo que no ocurría en décadas. La presencia de líderes mundiales y magnates de Silicon Valley aportó un toque internacional al evento.
Donald Trump, quien regresa al poder tras su primer mandato entre 2017 y 2021, llega con una clara intención de revertir muchas de las políticas de su predecesor, Joe Biden. Durante su discurso, el republicano mencionó algunas de las medidas que implementará en sus primeros días de gobierno. Entre las principales acciones está la firma de un centenar de órdenes ejecutivas para modificar varias políticas del mandato anterior, especialmente en áreas como inmigración, economía y medio ambiente.

Las políticas que Trump impulsará desde la Casa Blanca
Una de las principales promesas de Donald Trump en su discurso de investidura fue enfocarse en la recuperación económica de Estados Unidos. Enfatizó la creación de empleo a través de incentivos fiscales a las empresas y la eliminación de regulaciones que, según él, obstaculizan el crecimiento económico. Además, anunció planes para fortalecer la seguridad nacional, con medidas para controlar la inmigración ilegal y reforzar las fronteras.
Donald Trump también destacó la importancia de mantener una política exterior fuerte, mencionando la necesidad de proteger los intereses de EE. UU. frente a otras potencias globales. En cuanto a la energía, prometió reactivar la industria del petróleo y el gas, favoreciendo la independencia energética del país. Estas medidas, junto con otras políticas, marcan la dirección que tomará su gobierno en los próximos años.
El menú de la toma de investidura
El evento no solo estuvo marcado por discursos y políticas, sino también por una lujosa comida de investidura. El menú, servido en el Statuary Hall del Capitolio, contó con platos representativos de la gastronomía estadounidense. Los asistentes, incluidos miembros del Congreso, disfrutaron de una comida elegante que reflejó el carácter tradicional de este tipo de ceremonias.

El primer plato consistió en pastel de cangrejo de la bahía de Chesapeake, acompañado de tartar de tomate, una selección de verduras y aceite de cebollino. Este entrante fue maridado con un Chardonnay de la bodega Veritas Vineyard. De plato fuerte, los comensales degustaron un filete de Angus de Omaha, acompañado de zanahorias, brócoli, gratinado de patatas y salsa de trufa al vino tinto, maridado con un Cabernet Sauvignon de Mount Veeder, procedente del Valle de Napa, en California.
Para el postre, los asistentes pudieron disfrutar de una terrina helada de manzana con helado de crema agria y caramelo salado, acompañada de espumoso Korbel Russian River Valley Natural. Este menú, con una clara representación de la gastronomía estadounidense, complementó la ceremonia, que además de ser un evento político, también se caracterizó por su elegancia y simbolismo.
El evento en el Capitolio
La elección del Capitolio para la investidura fue significativa. Por primera vez en décadas, la ceremonia no se celebró en el exterior del edificio, lo que le dio un carácter más íntimo, pero igualmente solemne. La sala Statuary Hall, adornada con manteles azules y estampados florales, fue el escenario donde se celebró el banquete posterior a la toma de posesión.
A lo largo de la jornada, el evento fue cubierto por medios internacionales, quienes destacaron la presencia de altos dignatarios y empresarios, entre ellos algunos magnates de Silicon Valley, que acompañaron al presidente en este importante día. La atmósfera que se vivió en el Capitolio fue una mezcla de celebración y expectativas ante los cambios que traerá este segundo mandato.

Expectativas de la administración Trump
Con una mayoría republicana en ambas cámaras del Congreso, Trump tiene la posibilidad de avanzar rápidamente con su agenda política, algo que sus seguidores esperan. Las primeras semanas de su mandato serán clave para ver cómo implementa las medidas anunciadas durante su discurso. La firma de las órdenes ejecutivas será un primer paso en su objetivo de revertir las políticas de su predecesor y consolidar su visión para el futuro de Estados Unidos.
El regreso de Trump al poder promete ser un periodo cargado de desafíos, tanto a nivel interno como internacional. Las promesas de recuperación económica, refuerzo de la seguridad nacional y políticas energéticas serán temas prioritarios durante su gestión, pero también es probable que enfrente oposición tanto dentro del país como en el ámbito global.
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