Impacto económico en Cancún se siente en el sector restaurantero. Los dueños de negocios piden apoyo ante los recortes en los horarios de operación, mientras el ayuntamiento mantiene su postura. Esta situación ha generado preocupaciones sobre la estabilidad laboral y la viabilidad de los establecimientos nocturnos.
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Horarios sin extensión
La Dirección de Fiscalización en Benito Juárez asegura que los operativos de vigilancia se mantienen sin reportes de incumplimiento. Las autoridades municipales confirman que no se han aplicado sanciones por la reducción de horarios en bares, discotecas y restaurantes. El titular de Fiscalización, Alberto Covarrubias, ha sido claro al respecto: los horarios de cierre se mantienen hasta las 2:00 de la madrugada en la zona centro y hasta las 3:00 en la zona hotelera.
No habrá extensiones de horario durante el verano, una decisión que impacta directamente a los negocios. Covarrubias enfatizó que se realizan operativos nocturnos en ambas zonas y que, hasta el momento, los establecimientos han cumplido con la normativa establecida.
La medida busca reducir la violencia familiar, donde el consumo de alcohol es un factor. Sin embargo, Julio Villarreal Zapata, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) en Cancún y Quintana Roo, ha expresado su preocupación. Según Villarreal, los restaurantes están experimentando una caída de hasta un 10% en sus ventas.
Esta baja se traduce en una menor afluencia de clientes en los turnos nocturnos, afectando directamente los ingresos de los negocios y, por extensión, las propinas de los trabajadores. La situación es compleja, ya que, si bien se busca un bien social, las consecuencias económicas son evidentes para el sector.

Petición de ayuda
Ante este panorama, la Canirac solicitará incentivos al gobierno municipal. La intención es mitigar los efectos negativos de los horarios reducidos. Entre las propuestas de Villarreal se encuentran descuentos en el pago de la recolección de basura, permisos de ecología, y protección civil. También se contempla la posibilidad de obtener reducciones en el pago de horas extras de inspección.
El objetivo es encontrar mecanismos que permitan a los negocios sostenerse y evitar la pérdida de empleos. Villarreal señaló que muchos trabajadores nocturnos ya no desean continuar en sus puestos por la disminución en sus ingresos, lo que podría llevar a despidos si no se encuentran soluciones.
La solicitud de incentivos busca equilibrar la situación y ofrecer un respiro a los restauranteros. La industria considera que hay varias maneras en que el ayuntamiento puede apoyar para que los negocios no cierren y se mantengan las fuentes de trabajo. Este diálogo entre el sector privado y las autoridades es esencial para encontrar soluciones que beneficien a ambas partes, permitiendo el cumplimiento de la normativa sin que ello signifique un colapso económico para los establecimientos. La Canirac espera una respuesta favorable del gobierno municipal para implementar medidas que ayuden a la industria a sobrellevar esta etapa.

Alerta por extorsiones
En un hecho separado, comerciantes de la Región 231 fueron víctimas de extorsión en Cancún. Recibieron llamadas intimidantes de un supuesto miembro del grupo delictivo “Los Pelones”, quien exigía el pago de “derecho de piso”. La amenaza fue reportada de inmediato. Esto activó el protocolo de atención del Grupo Centurión de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
Los hechos ocurrieron en un negocio de venta de pollos procesados, ubicado en la avenida Leona Vicario, entre la calle 33 y la calle 37, en el municipio de Benito Juárez. La víctima relató que la llamada provenía de un hombre que se identificó como “el ingeniero”. Esta persona ya se había comunicado el día anterior. El establecimiento afectado había publicado recientemente su ubicación y datos de contacto en Google Maps, lo que pudo haber facilitado el contacto por parte de los extorsionadores.
Gracias a labores de inteligencia y rastreo telefónico, se identificó que el número extorsivo provenía del penal de Santa Martha Acatitla. Este número tenía registros previos en el 9-1-1 y en la línea de denuncia anónima 089, lo que sugiere que no es la primera vez que se utiliza para este tipo de delitos. Las autoridades están reforzando la vigilancia con el programa “Negocio Seguro” para prevenir futuros incidentes y proteger a los comerciantes de Cancún. La coordinación entre los ciudadanos y las fuerzas de seguridad es vital para combatir este tipo de crímenes y garantizar la seguridad en la región.
Fuente: 24 hrs Quintana Roo