El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, presentó este lunes una iniciativa para la congelación nacional de la compra, venta, importación y transferencia de armas de fuego en Canadá.
En otras palabras, estamos limitando el mercado de las armas de mano”
subrayó Trudeau en una rueda de prensa.
Y agregó: “como vemos que la violencia con armas sigue aumentando, es nuestro deber seguir tomando medidas”, tal y como ha recogido la emisora canadiense CBC News.
La iniciativa se plasmó en un proyecto de ley presentado este lunes. Según DW, esto lo convertiría en el intento más ambicioso del Gobierno de Canadá para restringir el acceso a las armas de fuego en este país.

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Antiguas y nuevas propuestas
El proyecto de ley presentado revive algunas medidas federales que no se aprobaron antes de las elecciones generales del año pasado en Canadá.
También incluye algunas propuestas nuevas hechas durante la campaña de Trudeau.
Entre ellas figuran:
- Retiro de las licencias de armas de fuego a los implicados en casos de violencia doméstica o acoso criminal
- Aumento de las sanciones penales por contrabando y tráfico de armas de fuego,
- Ley de “bandera roja” que obligaría a las personas consideradas una amenaza para sí mismas o para los demás a entregar sus armas de fuego a las fuerzas del orden.
- Limitaciones en la capacidad de los cargadores
- Prohibición de algunos juguetes que parecen pistolas.
La medida tendría excepciones, por ejemplo para tiradores deportivos de élite, atletas olímpicos y guardias de seguridad. A los canadienses que ya poseen armas de fuego se les permitiría conservarlas.
Actualmente la legislación canadiense tiene medidas más duras que las de Estados Unidos. Sin embargo, su tasa se ha ido incrementando desde el 2020.
Según reporta Reuters, los rifles de asalto y otras 1500 tipos de armas fueron prohibidos hace dos años luego de un tiroteo masivo en Portapique, Nova Scotia. El gobierno también puso en marcha un plan para comprar de regreso las que estaban en el mercado a sus dueños.