Chetumal, Quintana Roo, 6 de mayo de 2025.— Jóvenes de todo el estado alzan la voz por la paz y la salud mental. Este 14 de mayo, Quintana Roo será uno de los epicentros de la Jornada Nacional de Tequios por la Paz y Contra las Adicciones, un movimiento colectivo que busca transformar comunidades desde la fuerza, creatividad y liderazgo juvenil.
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Jóvenes, protagonistas del cambio
El evento, impulsado por el Instituto Mexicano de la Juventud (IMJUVE), pone en el centro a las juventudes como agentes clave para la reconstrucción del tejido social, a través de acciones comunitarias, arte urbano, deporte, cultura y recuperación de espacios públicos. Desde murales colaborativos hasta talleres sobre salud emocional y prevención de adicciones, la jornada promete ser una sacudida positiva en los barrios y colonias del estado.
Más que un evento, un llamado a tomar las calles con propósito
Los tequios —tradición ancestral de trabajo colectivo— servirán como vehículo para reconectar a la juventud con su entorno, con actividades que invitan a reapropiarse del espacio público y crear comunidad. Cada intervención será una declaración: la juventud no se rinde ante las adicciones ni la violencia.
La paz no es solo un discurso, es acción
Durante la presentación del proyecto, Abraham Carro Toledo, director del IMJUVE, destacó que esta jornada forma parte de la Estrategia Nacional por la Paz, enfocada en fortalecer la salud mental, prevenir el consumo de sustancias y fomentar la participación ciudadana.
“No se trata de prohibir, sino de construir. De darles a los jóvenes espacios, razones y comunidad para elegir otro camino”, señaló.
Un movimiento colectivo que empieza con una brocha, una pelota o una canción
Representantes de educación, cultura y juventud en Quintana Roo coincidieron en que esta jornada es una oportunidad para escuchar a las nuevas generaciones, visibilizar sus necesidades y crear puentes entre instituciones y ciudadanía.
El 14 de mayo, parques, canchas, escuelas y centros comunitarios se llenarán de jóvenes con una sola consigna: la paz también se construye con nuestras manos.
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