Productores de maíz en distintas regiones del país han encendido las alertas y se han declarado en crisis ante las altas temperaturas prolongadas, que están afectando severamente la producción del grano básico.
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Cosechas en riesgo
Los agricultores advierten que el calor extremo, acompañado de la falta de lluvias, ha provocado marchitamiento, pérdida de hojas, retraso en el crecimiento y, en casos más críticos, la pérdida total de cultivos. Estados como Sinaloa, Jalisco, Michoacán, Puebla y Oaxaca reportan daños severos en sus sembradíos.
“Estamos enfrentando un desastre. Ya no sabemos si cosecharemos lo suficiente para sostener el ciclo agrícola”, lamentó un productor en Puebla, donde las temperaturas han superado los 38°C durante varios días consecutivos.
Crisis económica para el campo
El aumento en los costos de producción, el riego más frecuente y las pérdidas por calor están llevando a muchos pequeños y medianos productores al límite financiero. La falta de apoyos suficientes del gobierno ha empeorado la situación, según denuncian las organizaciones del campo.
Además, se teme que esta crisis derive en incrementos en el precio del maíz y sus derivados, como la tortilla, afectando también el bolsillo de los consumidores.
Piden acciones urgentes
Los productores hacen un llamado a las autoridades federales y estatales para activar programas de emergencia, acceso a seguros agropecuarios, apoyos económicos directos y soluciones sostenibles ante el impacto del cambio climático.
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