Durante la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, la gobernadora Mara Lezama Espinosa resaltó el papel transformador del Tren Maya, que no solo vincula destinos, sino que se erige como un medio para que el mundo contemple los fascinantes vestigios arqueológicos de la cultura maya.
Siga leyendo: Continúa la modernización de semáforos en Cancún de la mano de Ana Paty Peralta.
Contenido
Mara Lezama en conferencia matutina
En un encuentro trascendental, Mara Lezama presentó con entusiasmo las maravillas arqueológicas del Mundo Maya, subrayando el papel central del Tren Maya en la metamorfosis profunda que experimentarán los quintanarroenses. Más allá de su función logística, este proyecto se erige como un símbolo de fusión entre la modernidad y la reivindicación de la rica herencia cultural maya, un patrimonio que la gobernadora considera con justo orgullo como parte integral de la identidad de Quintana Roo.
“Este proyecto, que se convierte en su legado, señor presidente, trasciende los límites de rieles y vagones; es la síntesis de la modernidad entrelazada con la reafirmación de la cultura maya, una fuente de orgullo para nuestra identidad que queremos compartir con el mundo”, expresó Lezama ante la figura presidencial.
La gobernadora extendió su gratitud al director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto Hernández, por la labor de salvamento llevada a cabo durante las fases de construcción del Tren Maya. Esta obra, clave en el Nuevo Acuerdo por el Bienestar y Desarrollo de Quintana Roo, aspira a traducir el éxito turístico en una prosperidad que se distribuya equitativamente entre los habitantes de la región.
El Meco hasta Tulum
Mara Lezama resaltó que, gracias a las rutas de transformación trazadas de norte a sur en Quintana Roo, el mundo entero tendrá acceso a un itinerario fascinante, repleto de historia, experiencia y cultura. Desde El Meco en Cancún hasta Tulum, el Tren Maya se convierte en un vínculo con los tesoros arqueológicos, abriendo ventanas a sitios emblemáticos como El Rey en Playa Delfines y San Miguelito, hogar de antiguos vestigios y el Museo Maya de Cancún.
A medida que avanza, el tren revela joyas como Cobá, una ciudad comunicada por extensas calzadas blancas, y Xel-Há, un antiguo puerto comercial con pinturas murales excepcionalmente conservadas. Las estaciones próximas al nuevo aeropuerto internacional “Felipe Carrillo Puerto” ofrecen acceso a lugares estratégicos como Muyil y Chacchoben, este último destacando por sus impresionantes conjuntos arquitectónicos.
La ruta se extiende hacia el sur, llegando a Bacalar y desvelando la puerta hacia Ichkabal, una ciudad imponente que se abrirá al público gracias a los esfuerzos del INAH y la SEDENA. Oxtanká, una ciudad maya en la bahía de Chetumal, también se suma al itinerario, revelando la tumba de un jerarca maya con un pectoral de conchas que pronto se exhibirá en el museo de la costa oriental de Tulum.
Visita a Kohunlich
La culminación de esta travesía se encuentra en Kohunlich, con sus mascarones impresionantes vinculados a la deidad del sol y de Venus, así como Dzibanché y Kinichná, accesibles desde la estación de Nicolás Bravo.
Con entusiasmo, Mara Lezama proyectó que más de 30 millones de turistas de todo el mundo tendrán la oportunidad de sumergirse en el esplendor de la cultura maya. Este viaje no solo enriquecerá la comprensión global de la historia, sino que también se traducirá en una derrama económica que alcanzará cada rincón de Quintana Roo, con la promesa de una prosperidad compartida para todos sus habitantes.
Con información de El Universal.