En una decisión contundente, un juez federal ha ordenado al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador acatar la suspensión definitiva que prohíbe continuar con las obras del Tramo 5 Sur del Tren Maya, que conecta Playa del Carmen con Tulum. Esta medida se debe a los daños ambientales causados en la zona y a la falta de cumplimiento con requisitos legales.
La orden judicial, emitida en respuesta a una solicitud del colectivo Sélvame del Tren, enfatiza que desde febrero se había instruido al Fonatur Tren Maya y otras autoridades a detener las obras hasta que se realizaran estudios geológicos, geofísicos y geohidrológicos en la región, como lo establece la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA). Sin embargo, las autoridades no han cumplido con esta medida y han continuado con las obras, provocando daños significativos en cuevas y cenotes.
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El juez primero de Distrito en Yucatán, Adrián Fernando Novelo Pérez, ha advertido que el incumplimiento de la suspensión puede acarrear diversas sanciones para las autoridades responsables. Según la Ley de Amparo, aquellos servidores públicos que no acaten las suspensiones judiciales pueden enfrentar penas de hasta nueve años de prisión, multas y destitución de sus cargos.
Además, el juez ha solicitado a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) que informe sobre las acciones realizadas para garantizar el cumplimiento de la Manifestación de Impacto Ambiental en la zona del proyecto del Tren Maya.
Estas medidas legales representan un paso importante en la protección del medio ambiente y en la exigencia de cumplimiento de las normativas ambientales por parte de las autoridades gubernamentales.
Inauguración completa del Tren Maya
La inauguración completa del Tren Maya, anunciada por el presidente López Obrador para después de las elecciones del próximo 2 de junio, podría estar en entredicho si las obras continúan enfrentando obstáculos legales y ambientales de esta índole.
La sociedad civil y organizaciones ambientales esperan que estas acciones judiciales contribuyan a preservar la biodiversidad y los recursos naturales en la región, así como a garantizar un desarrollo sustentable en el proyecto del Tren Maya.