En el libro “El origen de las especies” de Charles Darwin, un descubrimiento científico ha provocado una reacción pública y política. Tan viva y emotiva como la suscitada por el anuncio de que el clima está cambiando y que nosotros, los hombres, seríamos los primeros responsables. En ambos casos, esos progresos en la comprensión científica influyen en la idea que el hombre se hizo de sí. Si la sociedad acogió con reticencia los trabajos de Darwin, se debió a que rechazaba la idea de que el hombre no es nada más que: “una especie entre otras”. Lo mismo ocurre con el cambio climático. A muchos les cuesta admitir que nuestra especie es capaz de alterar realmente el curso de una realidad como la que vivimos todos los días, tan poderosa como la del planeta tierra. De acuerdo Katherine Richardson Christensen es Facultad de ciencias de la Universidad de Copenhague
Compromisos de México
El año pasado la Semarnat presentó aspectos relevantes de la nueva NDC (por su siglas en inglés). Son los compromisos asumidos por los países que forman parte de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) y que entregará formalmente ante el Acuerdo de París. Probablemente durante la COP 27. Que junto con grupos de la sociedad civil insistió en la necesidad y urgencia de acciones. Esto permitirá facilitar el seguimiento de los avances en la reducción de emisiones. Una vez entregada las metas de mitigación ambiciosas, el gobierno y los grupos de la sociedad civil debemos avanzar con eficacia en la implementación de las acciones de descarbonización de cada sector relevante.
Desde la sociedad civil y cumplir con un enfoque de justicia climática México, estará entre los 10 mayores emisores del mundo a partir de mediados de esta década. En el momento de publicar este reporte, nuestro país fue el único integrante del G20 que no ha planteado una fecha para llegar a cero emisiones netas. Las naciones más desarrolladas como Estados Unidos, Canadá y las de la Unión Europea se comprometieron a llegar, a más tardar, en 2050. En el caso de China se comprometió a alcanzar cero emisiones en el año 2060, y la India, en 2070.
Los esfuerzos de los países y sus compromisos deben corresponder a sus respectivas capacidades, tal como lo establece el propio Acuerdo de París-México sobre las oportunidades que existen para reducir nuestras emisiones, existen una serie de medidas y políticas públicas que permitirían a nuestro país cumplir con los compromisos pendientes ante la comunidad internacional. Sumado a que puedan generar empleos verdes, compatibles al desarrollo económico y social del país.
Los compromisos
México, propone avanzar en la transición energética justa, la cual requiere de un incremento de la participación de las energías renovables y salida de combustibles fósiles como el carbón y el combustóleo. Garantizando condiciones de justicia, equidad y bienestar para las poblaciones involucradas y afectadas por la transición.
Por otro lado, el análisis no incorpora entre las medidas de mitigación que consideramos como prioritarias, varias de las acciones anunciadas por el gobierno federal como emblemáticas como “El programa Sembrando Vida” y medidas relacionadas con el carbono azul, es indispensable transparentar la metodológicos de las estimaciones y de tal manera que tanto las y los tomadores de decisión como la ciudadanía en general pueden consultar y entender fácilmente la información técnica y los supuestos considerados para respaldar las medidas propuestas.
La meta de la reducción de emisiones sea lo suficiente pronunciada para llegar en 2030 a la meta de mitigación propuesta es un reto que está a la vuelta de la esquina.
El combate al cambio climático, no es simplemente una medida, hay compromisos que no se alcanzan a percibir o simplemente no se ven. Si bien es cierto, existe apoyo internacional de manera puntual y/o para la elaboración de herramientas como las de leyes y reglamentos, pero, para combatir el Cambio Climático es urgente que los programas de adaptación y mitigación de cada municipio, estado, federación en conjunto con la sociedad civil informen los avances que tengan y saber si están alineados entre (gobiernos). Los esperamos entonces…
A inicios de este año se hizo un ejercicio de Inteligencia artificial con Charles Darwin.
Al ser consultado por los terremotos que azotan al mundo, el investigador británico dijo que “cuando escribí esto, estaba reflexionando sobre la naturaleza repentina y poderosa de los terremotos. Como naturalista me acostumbré a observar y a estudiar los cambios lentos y graduales que ocurren en el mundo natural. Sin embargo, un terremoto es un evento abrupto y violento. Puede alterar drásticamente el paisaje y causar destrucción a gran escala. Un terremoto puede revertir nuestras ideas y creencias más fuertes sobre el mundo natural”.
Cambio Climático.
Al ser cuestionado sobre el cambio climático, Darwin aseguró que “la gente realmente no entendió por completo las repercusiones potenciales de la rápida industrialización que estaba ocurriendo. Un cambio en la temperatura de tan solo 1°C podría tener un impacto masivo. Un aumento de 4°C en la temperatura mundial transformaría completamente en planeta. Hablamos de la extinción de miles de especies. Realmente es una amenaza existencial para la civilización humana” ¡¡Tiene razón Darwin!!