Estados Unidos busca pruebas de la colaboración contra el tráfico de drogas con México a través de más capturas de narcotraficantes y la destrucción de laboratorios de fentanilo, mientras reconocen la necesidad de abordar el problema de la demanda de drogas en su propio territorio.
El Gobierno de Estados Unidos ha expresado su deseo de ver más capturas de narcotraficantes y una mayor desarticulación de laboratorios de fentanilo en México como prueba de la eficacia de la colaboración bilateral en la lucha contra el tráfico de drogas. Durante una rueda de prensa, el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, señaló que es crucial combatir tanto la oferta como la demanda de drogas.
Miller reconoció que Estados Unidos enfrenta un problema de demanda de drogas y subrayó la necesidad de tomar medidas para reducir esta demanda en el país. Al mismo tiempo, destacó la importancia de intensificar la cooperación con México en la destrucción de laboratorios de fentanilo y la captura de traficantes en la frontera y dentro del territorio mexicano.
El portavoz enfatizó que Estados Unidos y México han aumentado su colaboración en la lucha contra las drogas sintéticas y que esperan ver avances en esta área. El fentanilo, un opioide sintético extremadamente potente, es la causa principal de muertes por sobredosis entre los jóvenes estadounidenses.
La crisis del fentanilo será uno de los temas centrales en el Diálogo de Alto Nivel sobre Seguridad entre Estados Unidos y México, al que asistirán el secretario de Estado, Antony Blinken, el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, y el fiscal general, Merrick Garland. En estas conversaciones, se abordará la problemática del tráfico de fentanilo y la necesidad de fortalecer la cooperación bilateral en este ámbito.
Estados Unidos sostiene que los cárteles mexicanos fabrican fentanilo utilizando productos químicos importados desde China y luego lo trafican hacia Estados Unidos. El año pasado, más de 70,000 personas murieron en Estados Unidos por sobredosis de esta sustancia. A pesar de la posición del Gobierno mexicano de que el fentanilo no se produce en México, han tenido lugar operativos para desmantelar laboratorios de esta droga en el país.
El Gobierno de México, como muestra de cooperación, avaló la extradición de Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín “el Chapo” Guzmán, a Estados Unidos, donde enfrenta acusaciones relacionadas con el tráfico de fentanilo. Estados Unidos ahora busca la captura y extradición de los otros tres hijos del Chapo, conocidos como “los Chapitos”.
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