Google acumula casi 45 millones de entradas de búsqueda acerca de cómo silenciar a los seres queridos de las redes sociales.
No es personal: Hay gente a la que queremos en la vida real que, por otro lado no nos cae tan bien que no queremos que sepa cierta parte de nuestra vida.
La psicóloga Ana Belén Medialdea, especialista en terapia breve estratégica indica que la distancia aporta una sensación de protección que desata la valentía.
La especialista insiste en la importancia de que, en el proceso, contengamos la imaginación: Nuestro yo digital y real tienen que tener nuestros mismos valores y los pies en la tierra.
Pero practicar la honestidad en un espacio que monetiza la exposición y nos devuelve una versión mejorada de nosotros mismos no es sencillo. Las redes tienden a la performance porque siempre hay un público dispuesto a observar y aplaudir.
Sentimos necesario mostrar nuestra mejor actuación para impresionarlos y eso requiere cierto grado de autoengaño.
Las redes se alimentan del deseo íntimo, favoreciendo un juego entre lo que soy y lo que quiero ser – menciona la socióloga y experta en neurolingüística, Alicia Aradilla.

Si sólo conozco de ti lo que publicas en Instagram, es fácil construir un personaje. Pero si puedo contrastar esa información en la vida presencial, el avatar puede debilitar nuestra relación.
A veces, es necesario silenciar a quien que queremos si no nos gusta su contenido. Es importante aprender a hacer un uso saludable del contenido que visualizamos, expresa la psicóloga Ana Belén Medialdea.
Hay que normalizar que silenciar a alguien de las redes sociales no es sinónimo de silenciarlo de tu vida. Al final, los buenos amigos se reconocen en el silencio.
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Fuente de texto: MUJERHOY
Fuente de Imagen: CLASESDEPERIODISMO.COM