Argentina.- Se viraliza en redes sociales la imagen desconsoladora de Lara, una joven de 22 años, murió por COVID.19 mientras esperaba una cama de hospital en Argentina.
Era estudiante veterinaria, siempre sonriente y voluntaria de una organización de caballos.
“Le llegó una cama muy tarde”, lamentó la madre.
“Se que nadie me va a dovolver a mi hija, pero no quiero que vuelva a pasar nadie por esta situación. Se sentía muy mal y necesitaba acostarse. Solicité permiso para que suba a una camilla que estaba ahí y no me autorizaron. Entonces se acostó en el piso a esperar su turno… Los médicos la vieron ahí tirada y la miraron como bicho raro y no la hicieron pasar. Fue todo muy injusto. Falta de solidaridsad, profesionalismo y empatía!”.
Su caso, más allá de que poseía una enfermedad preexistente (diabetes), demuestra cómo la pandemia golpea por su virulencia a las personas y a los sistemas de salud.